"Una falacia total". Así calificó ayer el ministro de Salud, Pablo Yedlin, la denuncia realizada por los trabajadores autoconvocados del Siprosa el miércoles, respecto de supuestos recortes en medicamentos e insumos hospitalarios. "Tiene que ver con una cuestión de partidos, un sector del Sitas forma parte de la UCR. Es un tema de llevar política partidaria a los hospitales y estamos en desacuerdo", rechazó el funcionario.
Defendió, por otro lado, el sistema de evaluación que se aplica a los trabajadores, también cuestionado por los miembros del Sitas. "Los empleados reciben y cobran desde hace más de un año el escalafón horizontal. Tienen que ser evaluados para poder ser promovidos", explicó. Por último, respondió a los reclamos por la demora en el debate de la Ley de Carrera Sanitaria. "Está en discusión con los tiempos legislativos. Están trabajando, porque tiene que salir con el acuerdo de todos", replicó Yedlin.
Con voz propia
Directores de hospitales también negaron un recorte presupuestario. Reconocieron, en cambio, que hubo algunos problemas específicos con insumos por la reorganización en el ámbito de las gerencias.
"Estamos en un proceso de reorganización, con una nueva gerencia. No tenemos déficit, compramos las mismas cosas. Pero nuestra idea es tratar de comprar cada vez mejor", detalló Oscar Hilal, del Hospital de Niños. El médico detalló que tuvieron algunos inconvenientes con elementos que demoraron en llegar por las trabas a las importaciones, y consignó que cada compra implica un proceso administrativo largo. Precisó que el fondo de funcionamiento de la institución es de $ 1,3 millón, de los cuales $ 900.000 se destinan a medicamentos e insumos descartables. Marcelo Monteros, subdirector médico del Padilla, remarcó que en los últimos años se realizaron mejoras en el edificio y en la incorporación de trabajadores. Puntualizó que a los empleados se destina un gasto por mes de más de $ 10 millones. A eso se suman $ 2 millones para el funcionamiento. "Hasta febrero de este año recibíamos $ 1,4 millón. Como se abrieron nuevas salas, se incrementó. Además tenemos $ 300.000 para prótesis, porque tenemos una deuda de arrastre. En dos meses más, anhelamos no tener espera", celebró. Por último, afirmó que en proceso de compra hay equipamiento por $ 4 millones. Diego Eskinazi, director del Centro de Salud, fue tajante: "no hubo recortes". "Gastamos $ 1,5 millón este mes. No faltó nada que tenga que ver con la protección del personal, ni para los pacientes. Sólo tuvimos problemas con proveedores que no cumplieron", expresó. Advirtió que se tiene que distinguir el origen de las denuncias. "Hay que ver qué rédito puede tener la gente que opina. Si tiene alguna orientación política o busca algún beneficio", concluyó.